En la audiencia de alegatos de clausura del juicio por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, el fiscal Juan Martín Bogado abrió la exposición ante el jurado popular con un relato que buscó reconstruir los hechos y el vínculo entre la joven y los acusados. Sostuvo que Cecilia fue manipulada y engañada, y que su trágico destino comenzó cuando se casó con César Sena, en medio del rechazo de la familia.
Con una demora de casi una hora y media, comenzó este jueves la audiencia de alegatos de clausura en el juicio por jurados por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, que tiene como principales imputados a César Sena y sus padres, Emerenciano Sena y Marcela Acuña.
El fiscal Juan Martín Bogado fue el encargado de iniciar la ronda de exposiciones. Antes de adentrarse en su argumentación, felicitó al jurado por su trabajo y pidió que imaginen el caso como un “rompecabezas” donde cada prueba, durante el debate, fue una pieza colocada para reconstruir “el antes, el durante y el después del crimen”.
“Cecilia creía en las personas y en el amor. Ella pensaba que iba a ser feliz con César. Estaba enamorada, pensaba en un futuro, pero lamentablemente se cruzó con las personas equivocadas”, expresó Bogado ante el jurado.
El fiscal sostuvo que Marcela Acuña y Emerenciano Sena no la querían, y que “Cecilia no quería ser piquetera ni tampoco usar la remera del Che Guevara”, frase con la que ilustró la distancia ideológica y personal que existía entre la joven y la familia Sena.
Según relató, la relación se quebró definitivamente tras el casamiento, ocurrido el 16 de septiembre de 2022. “Al día siguiente, César le dijo que debía divorciarse porque así lo imponía Marcela Acuña. Eso devastó a Cecilia. En los chats que vimos durante el juicio, ella estaba destruida”, sostuvo.
Bogado afirmó que la joven fue manipulada por la familia Sena, que le prometió dinero, una falsa herencia y un tratamiento para quedar embarazada, todo con el fin de convencerla de aceptar el divorcio.
Durante su exposición, el fiscal citó mensajes y audios incorporados como prueba: “Mi suegra me odia, busca la forma de separarnos”, le escribió Cecilia a su amigo Ronald Amarilla, quien declaró en el juicio. En otro mensaje dirigido a César Sena, le decía: “No me quiero meter en ese puterío… cuanto menos relación con tu familia y tu gente, mejor para mí. Voy a intentar que funcione lo nuestro, pero no me voy a esforzar porque tu madre me acepte”.