Los encuentros inesperados con animales silvestres pueden ser habituales en la provincia del Chaco. Sin embargo, no todas las personas saben cómo actuar frente a esta situación.

Este jueves, agentes de la Línea 105 rescataron a un oso melero que había ingresado a un domicilio en la localidad de Barranqueras. El animal se encontraba desorientado, y personal de la Brigada Operativa Ambiental (BOA) llegaron hasta el lugar para restituirlo a su hábitat natural.

El oso fue trasladado en una jaula para evitar que se lastime y finalmente liberado en una zona de monte cercana.

Vecinos entregan voluntariamente un carayá recién nacido

Paralelamente, desde la BOA informaron que un grupo de vecinos entregó voluntariamente un ejemplar de carayá recién nacido al Departamento de Seguridad Rural y Ambiental. El pequeño animal fue trasladado a la clínica veterinaria del Dr. Fernando Brañas donde recibió atención especializada.

Una vez estabilizado, se prevé su reubicación en la Fundación Carayá Roga, donde será cuidado y rehabilitado en un entorno adecuado para su desarrollo.

¿Cómo actuar si nos encontramos con un animal silvestre?

Un encuentro inesperado con un animal silvestre puede ser un momento tan fascinante como desafiante. Ya sea en un área rural, un parque natural o incluso en el patio de una casa, es fundamental saber cómo actuar de manera segura y respetuosa ante la presencia de un animal silvestre.

Cuando los vecinos detectan un animal fuera de su entorno natural, deben contactar a la Línea 105. Fernando Amione, miembro de la Brigada Operativa Ambiental (BOA), indicó: «Nosotros acudimos a todo tipo de rescate de fauna silvestre. Los vecinos, cuando divisan algún tipo de animal que está fuera del entorno natural, llaman a la línea, nos envían la ubicación y una foto para poder identificarlo«.

La fotografía es crucial para identificar al animal y determinar el mejor curso de acción. «Se pide una foto para identificar el ejemplar y en caso de ser necesario acudir al rescate del mismo y ponerlo al resguardo», explicó Amione. El objetivo es trasladar al animal de vuelta a su hábitat natural de manera segura. Durante este proceso, es esencial que los vecinos mantengan la calma. 

En el caso de encontrarse, por ejemplo, con una serpiente, Amione detalló: «Se les dice a los vecinos que se tranquilicen y mantengan la calma. Si tienen mascotas, que puedan encerrarlas, y si hay algún niño merodeando por los alrededores, también que se queden al resguardo».

La tranquilidad del animal también es una prioridad. Amione indicó que «es importante evitar cualquier tipo de riesgo y mantener la calma del animal para que no se encuentre estresado». Los expertos de la BOA están capacitados para manejar estas situaciones y garantizar que el rescate se realice de la manera más segura posible tanto para las personas como para los animales involucrados.