En lo que podría ser la última jornada del juicio por jurados por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, y previo a la deliberación, los siete imputados tuvieron la oportunidad de dar sus últimas palabras.
Gustavo Obregón, imputado por encubrimiento agravado, fue quien aprovechó la ocasión para romper el silencio que mantuvo durante todas las audiencias. Pidió perdón por su participación en el hecho y aseguró que lo hizo por la gratitud que tiene con la familia Sena.
“Pido perdón por si mi acción u omisión… nunca fue mi intención lastimar o agredir a alguien. Yo lo acompañé a César como lo he hecho infinitas veces por el cariño, el respeto e infinita gratitud que le tengo a su padre, Emerenciano (Sena) y a Marcela (Acuña) quienes son pilares fundamentales en mi vida y en la de mi familia”, afirmó, visiblemente nervioso. “Y porque a César lo quiero y lo siento como a un hijo de corazón”, añadió.
Cabe recordar que Obregón, durante la etapa de instrucción, confesó haber colaborado con César Sena en el proceso para descartar el cuerpo de Cecilia. De acuerdo a su relato, aquel fatídico 2 de junio de 2023, trasladaron el cuerpo en la caja de la camioneta del hijo del matrimonio Sena y lo llevaron hasta el campo Rossi, donde lo incineraron. Días después, regresaron a la zona para recolectar los restos y luego arrojarlos en el río Tragadero.