«ES MÁS SIMPLE DE LO QUE TODOS CREEN»: LA CONFESIÓN DE SABAG MONTIEL A LOS PERITOS SOBRE EL ATAQUE A CFK
A pesar de su negación a declarar en la causa, Fernando Sabag Montiel dio parámetros de su personalidad ante los expertos. Sus respuestas no son válidas para una declaración judicial, pero sí servirán al Ministerio Público.
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Fernando Sabag Montiel, el hombre que gatilló un arma en la cara de la vicepresidente Cristina Kirchner, confesó ante psicólogos, psiquiatras y médicos legistas que lo ocurrido el pasado 1 de septiembre fue «más simple de lo que todos creen».
Acorde a lo relatado en Infobae según fuentes judiciales, Sabag Montiel siempre se negó a declarar en la causa pero esta vez dijo ante los profesionales: «El acto fue simple. Es más simple de lo que todos creen: no me dijo nadie. No tiene tanta mística, yo estoy muy tranquilo ahora».
Según los expertos, Montiel es una persona llena de «pedantería» y «vanidad». El perfil psicológico y criminológico fue pedido por el Ministerio Público a cargo de Carlos Rívolo, y esta semana llegó a la causa con la firma de peritos oficiales.
En el estudio se recopiló la descripción de Sabag Montiel y la de su novia, Brenda Uliarte, quien fue procesada como coautora del intento de homicidio calificado.
Por su parte, Uliarte no colaboró con los peritos y sus respuestas fueron cortas. Fuentes le habrían confesado a Infobae que ella «de por sí es corta en sus respuestas y acá lo mostró». Además, estaría pasando por un cuadro depresivo.
El jefe de los «copitos», Nicolás Gabriel Carrizo, fue procesado como partícipe secundario del intento de homicidio y no aceptó ser entrevistado por el consejo de su defensa a cargo de Gastón Marano. Su defensa intenta que le concedan prisión domiciliaria.
Los expertos, sobre Sabag Montiel, también consideraron que posee un «discurso engorroso, extravagante y tedioso». Los calificaron también de «narcicista» que busca «impresionar», según relató Infobae.
Las ideas del hombre que intentó matar a CFK están relacionadas con temas de salud y con «carácter hipocondríaco». Según su relato, odia a la política y cree en la «justicia divina» ya que, entiende, está pagando «por los errores de los demás y por los propios».
En su carácter de recluso, se equipara con el líder sudafricano Nelson Mandela. «Para mí estar acá es un aprendizaje para poder tener introspección y analizar. Esto es un aprendizaje», habría sentenciado.
Fuente: Diario chaco