Según el informe, estas especies – que representan el 75,3% del volumen de comercialización del Mercado Central – tendrían un impacto directo en el Índice de Precios al Consumidor (IPC), con una suba proyectada del 24,5% para el segmento VTL -verduras, tubérculos y legumbres-, lo que implica un aporte del 0,54% al IPC general a través de la división Alimentos y Bebidas no alcohólicas.
Entre las frutas sólo la banana aumentó (17,1%), mientras que el limón (-39,6%), la naranja (-13,6%) y la manzana (-6%) registraron bajas. Sin embargo, la variación interanual del limón se disparó al 197,1%, la más alta del segmento.
En términos interanuales, el segmento VTL muestra una suba del 34,8%, con el tomate nuevamente a la cabeza con un alza de 110,9% respecto a marzo de 2024.
Se atribuye el encarecimiento del tomate a la necesidad de importar la especie desde Chile, Egipto y Brasil, donde el kilo se paga a $3.442 y $3.089 respectivamente, lo que generó una variación intermensual del 55,4% en los precios corrientes.